Kiko Matamoros ya comienza a padecer los altibajos emocionales en su estancia en la isla de ‘Supervivientes‘. El colaborador ya protagonizó algunos de los momentos más polémicos en los Cayos Cochinos y en más de una oportunidad reconoció cuánto echa de menos a su pareja, Marta López Álamo. Pero, en las últimas horas, Kiko recibió una linda sorpresa que lo hizo emocionar.
“Me encuentro muy molesto con muchas picaduras, las manos inflamadas. Pero bueno quiero demostrar que a pesar de tener 65 tacos soy un tipo duro”, aseguró Kiko Matamoros. Luego, añadió: “Yo creía que iba a ser un poco más fácil porque no contaba que me iban a picar los bichos estos. Tengo partes de mi cuerpo hinchadas pero por lo demás es un poco lo que me imaginaba. Es como un campamento en el que se pasa hambre”, decía minutos antes de recibir un detalle que le recargó los ánimos.
En ese momento, la dirección del programa le obsequiaba un bonito regalo al colaborador de parte su nieto Matías, el hijo mayor de Laura Matamoros. El pequeño de cuatro años logró emocionar a su abuelo: “Es un dibujo de mi nieto. De Matías. De Mati. Salen él, su hermano, la perra, su madre… y me dice te quiero mucho”, dijo, con sus ojos al borde las lágrimas.
“Yo sí que te quiero mucho, pero hazme el favor de estudiar para no verte de mayor como yo haciendo estas cosas. Muchas gracias a sus padres por hacerme llegar esto. Fue su cumpleaños el lunes y eché de menos estar con ellos”, expresó Matamoros. Pero no fue la única sorpresa preparada para el colaborador ya que Marta López también decidió dedicarle unas palabras de lo más románticas a su pareja: “Mi amor, estoy orgullosa de ti. Te amo con todo mi corazón. Todo lo que hablamos antes de irte sigue todo igual”.
Luego, continuaba: “Queremos ver a un Kiko gracioso, lo humano que eres, el gran corazón que lo tienes, de verdad. El hombre del que estoy enamorada se merece que lo conozca todo el mundo. Quiero pasar toda mi vida contigo. Tienes que aguantar. Sé que puedes. Están tus hijos, tus nietos, tus amigos, todos contigo. Te amo. Lo juro. Te amo mi amor”, le dijo Marta a un Kiko que no pudo evitar sentirse invadido por una profunda emoción.