Kiko Rivera es famoso desde el primer minuto de vida por ser hijo de Isabel Pantoja y de Francisco “Paquirri” Rivera. Tras el fallecimiento de su padre, y a medida que comenzó a crecer, la prensa le puso “Paquirrín” hasta que finalmente se ganó el lugar de figura y empezó a utilizar su propio nombre. A sus poco más de 20 años comenzó a aparecer en televisión como colaborador e invitado en los programas del corazón y, de esta manera, vio la posibilidad de darse a conocer para darle vida a su sueño de tener una carrera musical.
Pero sus ganas de ser un artista se cruzaron con su personalidad potente que no calla nada. Como forma de permanecer en los medios de comunicación, Kiko participó de realitys y concursos, donde no dudó en revelar intimidades familiares y empezar una guerra con mil idas y vueltas. Supervivientes 2011 fue la clave, la exposición que tuvo el DJ fue tan grande que cada declaración suya, a partir de ese momento, es noticia. Las primeras disputas se dieron con sus hermanos Francisco y Cayetano por desencuentros, luego cayó Isa Pantoja.
Su desestabilidad emocional, de la que él mismo habló en público en varias ocasiones, sumado a sus problemas económicos y de adicciones tenían a Kiko Rivera en una actualidad complicada. Con la llegada de Fran, su hijo con Jessica Bueno, su desesperación era aún mayor y vio en las entrevistas exclusivas una posibilidad de conseguir dinero. Todo lo que tenía para contar era interesante, tanto las revistas como los programas se beneficiaban y él obtenía una salvación momentánea.
Una de sus primeras tapas de revista decía “Kiko estalla contra todos” y otra posterior fue “Isa está destrozando a la familia”. El joven y su madre no aceptaban a la pareja de ese momento de Chabelita y se lo hicieron saber de todas las formas posibles. Este dolor siempre quedó en su hermana, incluso después de separarse y haber conocido a alguien más. Cuando nació su sobrino, Alberto, Kiko intentó hacer las paces, pero el daño ya estaba hecho.
Kiko Rivera sintió un quiebre con los medios de comunicación que tanto le habían dado cuando también empezaron a ser noticia sus deslices con otras mujeres o sus salidas nocturnas. Tras su separación de Jessica Bueno, tuvo una época de juerga hasta que conoció a Irene Rosales y, una vez más, un noviazgo que lo llevaría por el buen camino era novedad. Además de su casamiento, del nacimiento de sus hijas y de sus comienzos en la música, él continuaba hablando de los problemas con Chabelita.
“Mi hermana es que es una persona que no es cercana, mi hermana es muy fría. Que no tenga esos detalles de cariño con su abuela o sus tíos pues a nosotros nos duele", decía Kiko en 2015 en el Deluxe. Con quien sí tenía una buena relación era con su madre, siempre muy unidos, incluso cuando Isabel Pantoja estuvo en la cárcel, él fue su gran apoyo. También se llevaba bien con su prima Anabel, a quien trataba como una hermana y le dio la entrada a la televisión.
Los años seguían pasando y Kiko Rivera iba de la mano con los medios de comunicación. Las exclusivas no se detenían, para su casamiento, un bautismo o hasta para decir que con su exmujer las cosas no estaban bien. En 2020 se dio el hecho más polémico que le permitió a él mostrar otra cara: Cantora, la herencia envenenada. Allí reveló los engaños de Isabel Pantoja hacia él y sus hermanos. A partir de ese momento las tapas de revista eran para decir que su madre era una mentirosa y otros insultos más potentes.
Su última exclusiva fue por ese motivo y él eligió protegerse en su casa, aprovechó la pandemia y el confinamiento para avanzar en su disputa contra su madre. La vuelta de página se dio más de un año y medio después, tras su reencuentro con Isabel Pantoja, Kiko Rivera hizo una entrevista para contar cada detalle y para defenestrar a su hermana, otra vez, y a su prima Anabel. Pero esta ocasión es distinta, Isa Pantoja no se queda callada y le responde en Telecinco.
Ese canal que tanto lo refugió cuando necesitó hablar mal de cuanto familiar quisiese, ahora le está dando lugar a otra persona para criticarlo. Probablemente Kiko Rivera sintió una decepción más grande que la que sufrió de Isabel Pantoja. El DJ le hizo saber a Telecinco su bronca y a Chabelita la destrozó aún más. "Isa Pantoja y Anabel no tienen oficio ni beneficio", sentenció. El público saca sus propias conclusiones y lo pone en el ojo de la tormenta: ¿Él puede enojarse y hablar, pero el resto no?