A pocos días del estreno oficial, En el nombre de Rocío, Telecinco y La Fábrica de la Tele tienen un objetivo más que claro: defenderse de la catarata de denuncias que lloverán sobre la productora. Hay muchos enemigos de Rocío Carrasco que no quieren que se emita el documental: su hija, Antonio David, Amador Mohedano, Gloria Camila y ahora José Ortega Cano. Pero Rocío Flores tampoco está interesada en esta nueva producción. Ya no sabe que esperar de su progenitora, además, la impacienta un poco que esté por salir a flote una documentación privada de su abuela, Rocío Jurado.
La descendencia de la artista más querida de España, "La Más Grande", deja bastante que desear: nadie tiene una propuesta artística o siquiera periodística con la que continuar el legado familiar, ni siquiera la propia Rocío Carrasco. Todos viven de los escándalos, cuya mayoría tiene que ver con conflictos internos, secretos familiares y problemáticas, que luego se proyectan en una prensa rosa y polémica, y deja afuera las verdaderas vivencias de la artista con su hija.
Es así que Rocío Flores ha querido mandar un mensaje a su madre, casi como un último dardo envenenado contra su progenitora, ante la posible publicación de los documentos de su abuela. La hija de Rociíto y Antonio David Flores se muestra indiferente. No soporta más el hostigamiento mediático, y planea cortar con este tema de raíz.
Qué dijo la reciente cumpleañera
"Es el primer éxito de tu madre respecto a los documentos de tu abuela. No se si tienes miedo de que diga algo", preguntó una periodista, quien abordó a la rubia en plena vía pública, y se mostró interesada por la repercusión que está generando la promoción de En el nombre de Rocío. Por su parte, Flores respondía tajante y desinteresada: "No tengo nada que decir, ya lo sabes lo digo siempre". "No le tengo miedo a nada", argumentaba fastidiada.