A pesar de ser la mujer más conocida de España y de la que más se ha hablado, no todo se sabe de la vida de Isabel Pantoja. De hecho, muchas cuestiones han quedado en las sombras a pesar de que varias personas intenten sacar nuevos detalles e informaciones a la luz. Un ejemplo de esto es la reciente entrevista que Teresa Rivera concedió a Sábado Deluxe donde expuso los trapitos sucios al sol.
Te puede interesar: Teresa Rivera reveló el verdadero rostro de Isabel Pantoja
Obviamente que los famosos nos venden una vida perfecta ante las cámaras, de eso se trata el show. Sin embargo, las turbulencias en la relación de Isabel con Paquirri tampoco son un secreto. Muchas veces se ha hablado de esta historia de amor, o de supuesto amor, y en varias ocasiones se ha demostrado que no todo lo que brilla es oro.
Muchas veces se ha hablado sobre el arrepentimiento y las ganas de Paquirri de divorciarse debido al poco aguante que tenía de la vida que había escogido tener al lado de Pantoja cuando caminaron hacia el altar y dieron el "sí". De hecho, personajes muy íntimos del torero han confirmado esta afirmación cientos de veces en televisión.
Hay quienes consideran que Isabel solo sacó provecho de la idílica relación que supo construir ante la prensa con sus canciones dedicadas al amor de su vida, el torero más grande de todos los tiempos, que repite sin cesar en cada uno de sus conciertos como si fuera la Penélope de los tiempos modernos. Sin embargo, todo parece indicar que, desde la muerte de Paquirri, la Pantoja dejó en claro que tampoco sentía tanto por quien fue su marido.
La realidad es que Isabel siempre fue una espina en la vida de Paquirri, fue la manzana de la discordia en la familia Rivera. La cantante se aseguró que durante su matrimonio, el torero perdiera toda conexión con sus seres queridos, a quien ella no podía ni ver porque no los soportaba e impedían que tenga el control.
Si Paquirri estuviera vivo hoy y fuera testigo de las cosas que su exesposa dice y hace en su nombre, somos muchos los que apostamos a que enseguida se hubiese puesto en acción para desmentir cada una de las patrañas que se dicen de su relación. Sin embargo, tristemente la tragedia tocó la puerta del torero y eso le vino como anillo al dedo a Isabel, quien supo sacar provecho económico de su dolor.
Hoy se sabe que hay tres cosas ciertas: la primera, Paquirri no estaba enamorado de Isabel. La segunda, ella le fue infiel y cuando él lo descubrió encontró la llave para abrir el candado del matrimonio que lo tenía encerrado en la desdicha. Así, Paquirri se liberó divorciándose de la ambición en persona.
Al final, todas las grandilocuentes canciones de amor de Pantoja se terminan diluyendo en el abismo de las falacias cada vez que sale a la luz algún detalle más de su relación, que si vamos a ser sinceros, dista mucho de ser el cuento de hadas que nos querían hacer creer.
Hay una razón por la que Isabel Pantoja termina en malos términos con todo el mundo, desde sus hijos, su familia, y algunos colegas. Es que, a lo largo de su vida, la tonadillera no supo apreciar las cosas buenas y solo tuvo ojo para sacar provecho de cualquier cosa que se le ponga en frente.