Alba Carrillo regresa a la televisión, tras su accidentado paso en los platós de Secret Story - su madre participó del reality y ella fue su defensora oficial- y, poco a poco, va encontrando cuál es su perfil televisivo. Es que, como lo demuestra la excelente relación entre sus ex novios, Alba no es amante del drama ni del escándalo, por lo que está construyendo una carrera mediática que le esquiva a los lugares comunes de los cuales ya estamos acostumbrados.
La televisión española tiene mucho drama y Carrillo viene a quitárselo. Desde su rol en Ya es mediodía, mucho menos amarillista que Sálvame, la colaboradora ha encontrado un lugar más armónico para enfrentar las cámaras. Lejos de darle de comer a la prensa rosa, Alba le sacó una imagen a sus dos ex novios - que coincidieron en un evento - y demostró que en su vida no hay espacio para el drama.
Se trata de Santi Burgos, su última pareja, y Fonsi Nieto, padre de su hijo de diez años. Nieto es periodista y ha querido llevar a Burgos para que cuente cómo es su vida como piloto. Alba Carrillo gestionó el encuentro y tuvieron un buen rato juntos, haciendo pública la excelente relación que hay entre los hombres de su vida.
Y claro que las imágenes, por lo inusual en este tipo de personajes mediáticos, causaron revuelo. Y eso que no hay escándalo a la vista. La ausencia de dramatismo hace que la foto se convierta en noticia. Alba Carillo ha demostrado que su temperamento y personalidad no están en el plano de guardar rencores ni de cancelar por completo a una persona que fue importante en su vida.