La animadora de ‘Que tiempo tan feliz’, María Teresa Campos, ha decidido alejarse de las pantallas de televisión, espacio que fue durante tantos años su lugar de trabajo, al que tanta pasión le ponía. Pero según establecieron desde su círculo de personas más cercanas, hoy la dama prefiere vivir una viva más tranquila, aunque la situación familiar ha complicado el asunto.
Sobre esto último, su entorno ha aclarado que el enfrentamiento entre su hija Carmen Borrego y Paola Olmedo, la nuera de la dama, no le ha sentado bien. Además, según confiesan, María Teresa, un tanto incómoda con la situación hacia su primer nieto varón, llamó a sus hijas para pedirles paz, y tranquilizar así el asunto.
Sin embargo, hay otra cuestión que ha desestabilizado la vida de Campos, y fue su mudanza forzosa. La presentadora hace exactamente un año atrás tenía que mudarse de su mansión de Molina de la Hoz hacia a una casa en Aravaca, cerca de donde vive su hija mayor, Terelu Campos. Dicha situación fue difícil y complicada para la comunicadora, según describieron sus allegados.
Lo complicado de la situación se vinculó no solo en que María Teresa Campos había edificado su futuro en dicha mansión, sino que la mudanza la tuvo que hacer en el mismo momento que perdía la fe en volver a la televisión y luego de que su pareja la abandonara. Pese a todo esto, a un año de aquel momento, la dama se encuentra estable y, según describieron, razonablemente bien, aunque con un estado anímico algo bajo.