Es un día histórico para Juan Carlos I. Según informa el diario El Mundo, el Emérito acaba de aceptar y saldar el tercer y último requerimiento que le había impuesto Hacienda. De esta manera, ya no tiene deudas pendientes con la entidad y pone fin a un proceso que le costó más de dos años y de cinco millones de euros.
Esta tercera deuda que don Juan Carlos mantenía con Hacienda tenía como concepto el pago del IRPF de los regalos que recibió en sus cacerías entre 2014 y 2018, cuando ya no era Jefe de Estado. Sucede que el emérito no había declarado los gastos de sus viajes ,en aviones privados obsequiados por empresarios, para asistir a múltiples jornadas de caza.
Tras concretarse este pago, Juan Carlos pone fin a sus problemas con Hacienda. En total fueron tres requerimientos, que terminaron costando más de cinco millones de euros. El primero de ellos fue de 678.393, el segundo ascendió a 4.4 millones y del tercero no se conocen cifras oficiales, aunque se estima que no superó los 120.000 euros, debido a que una cifra mayor se consideraría un delito contra esa entidad pública.
Con la desaparición de sus deudas con Hacienda, Juan Carlos I da un paso muy importante y se libera de la sombra de esa institución. Igualmente, todavía debe afrontar una causa judicial rutilante que puede ponerlo en jaque: la denuncia establecida por Corinna Larsen.