Hace ya tres meses, Carlota Corredera tomó una decisión trascendental en su vida profesional: le dijo adiós a "Sálvame". Si bien para muchos esto podía significar algo negativo en la vida de la periodista, lo cierto es que ella está demostrando todo lo contrario. De acuerdo a lo que comparte en las redes, se la puede ver llevando una vida muy tranquila, equilibrada y plena.
Sobre esto último habló Carlota que actualmente se encuentra enfocada en nuevos retos profesionales que amplíen sus horizontes. La presentadora dejó en claro que su búsqueda de bienestar pasa por ella misma, por reencontrarse con su ser, con sus emociones que dejó olvidadas en el fondo del placard al rozarse y compartir tiempo con situaciones y personas que no le hacían feliz y que la hacían sentir desgastada.
Corredera reveló hace unos meses que la clave para llegar a este momento de plenitud es la terapia. La periodista comentó que comenzó a realizar un tratamiento psicológico con una profesional en la materia y que le sentó muy bien. De hecho, recientemente dio algunos detalles de cómo fue su última sesión con su psicóloga.
"Estaba muy tocada y empecé a ir a la psicóloga", confesó en su momento, y además procuró aclarar que no tenía que ver con la violencia que recibía en las redes por expresarse feminista y haber sido una de las voceras y principal apoyo de Rocío Carrasco en su denuncia mediática contra Antonio David Flores, sino que se lo adjudicó a la pandemia de Coronavirus que tuvo al mundo en vilo.
"Dentro de las taras que tengo, más o menos consigo gestionar lo que me dicen gracias a una psicóloga que me sostiene", había comentado Carlota Corredera en dicha ocasión y ahora, con total naturalidad, profundizó en lo que sucedió la última vez que habló con su terapeuta. "Mi psicóloga me ha dicho que he vuelto de Jávea con el semblante renovado y creo que tiene razón #BateríasCargadas #SuperAllegados #Mediterráneamente", escribió en su cuenta de Instagram.
En la foto que compartió en sus seguidores de la red social de la camarilla, Corredera puede verse sin una gota de maquillaje, mostrando su rostro al natural, mientras disfrutaba de unos espectaculares días de desconexión y meditación a las orillas del Mar Mediterráneo.