Cada vez falta menos para que en Mónaco se celebre una de las fiestas más importantes. Prevista para el próximo 9 de julio, el principado se vestirá de gala para vivir el icónico "Baile de la Rosa", que tendrá lugar en la Salle des Etoiles del Sporting de Monte-Carlo. Previamente, el baile había sido aplazado por la situación sanitaria.
Si bien se trata de una velada que es de gran importancia para los Grimaldi, ha estado marcada, durante años, por la ausencia de la princesa Charlène. Precisamente fue desde el año 2014 que la esposa del príncipe Alberto no acude a dicha reunión, por lo que es Carolina quien suele ocupar el rol de primera dama.
Cabe la duda de la participación de Charlène, dado que desde su regreso de Sudáfrica sus apariciones públicas han sido muy limitadas. Si bien el hecho de que la princesa asistirá o no es todavía un misterio, no hay dudas de que allí estarán presentes Andre y Pierre Casiraghi, Carola de Mónaco y el mismo príncipe Albert.
Otra de las teorías apunta a que la princesa intente acudir, dado que su ausencia alimentaría aún más las teorías de crisis en el matrimonio así como las que señalan al gran distanciamiento entre Carolina de Mónaco y Charlène, quienes evitan coincidir en público.