Un hecho trágico ha ocurrido en Santovenia de Pisuerga en Valladolid. Un hombre cometió un crimen y luego se atrincheró en su vivienda con dos rehenes. La situación de tensión duró más de doce horas hasta que el protagonista decidió entregarse. En medio de la cobertura de 'Ya es mediodía', una reportera del programa pasó un mal momento.
Mientras la periodista Marina Vidal hacía su labor, en los alrededores se encontraban familiares de las personas que habían sido tomadas de rehenes. Algunas de ellas se hallaban muy nerviosas y experimentaron fastidio cuando las enfocaron las cámaras de 'Ya es mediodía'. A partir de allí intentaron por todos los medios que no vuelvan a exponer su imagen.
Mientras Marina Vidal hacía su reporte, una mujer fue a increparla y otro hombre se abalanzó sobre el camarógrafo. En malos términos, les pidieron que dejen de grabar inmediatamente. Ante esta situación una reportera de Antena 3 decidió intervenir para ayudar a sus colegas.
La tensión se hizo mayor cuando un segundo hombre se acercó a increpar los medios. A partir de allí tuvo que intervenir la Guardia Civil para que la situación no pase a mayores. Finalmente la reportera de 'Ya es mediodía' les explicó que no se estaban transmitiendo imágenes de ellos en el directo y los familiares quedaron más tranquilos.