La vida no parece darle revancha a Iñaki Urdangarin, que ahora ha debido postergar su viaje a Estados Unidos, donde tenía programado asistir a las bodas de su sobrino y sobrina, por culpa de la delicada situación judicial que atraviesa. Quien sí ha estado, sin embargo, ha sido la infanta Cristina.
La ausencia del exjugador de balonmano ha tenido como consecuencia que sea la hija de los reyes, don Juan Carlos y doña Sofía, quien se trasladará a América junto a tres de sus hijos, Juan, Miguel e Irene, con el propósito de presenciar la reunión familiar.
Según ha trascendido, el motivo que ha impedido al exdeportista acompañar a su familia ha sido que le denegaran el visado para entrar en el país. Las leyes estadounidenses son particularmente severas con quienes tienen antecedentes penales, por lo que han impedido a Urdangarin de ir a los enlaces de su sobrina Nuala y la de su sobrino.
Recordemos que el pasado mes de marzo fue cuando el padre de Pablo Urdangarin obtuvo la libertad condicional, luego de que el juzgado pertinente le concediera este permiso y lo dejara con la posibilidad de rendir cuentas a la cárcel alavesa de Zaballa. En este sentido, el aristócrata permanecerá libre hasta abril de 2024, fecha en la que se extinguirá la pena.