La presentadora de televisión, María Teresa Campos, está pasando por un importante bajón anímico. La periodista de 82 años extraña el ambiente laboral y está deseando que la contraten de alguna cadena, sin embargo esa posibilidad no llega. "Yo necesito trabajar, aunque sea un poquito. Eso llena mi vida y no estoy en mi casa sentada", revelaba la locutora en una reciente entrevista.
Una persona del círculo privado de María Teresa Campos le ha contado al sitio Informalia que la presentadora "ya se ha dado cuenta de que esa oportunidad que pide a gritos no va a llegar". Esto ha provocado que la madre de Terelu Campos esté arrastrando "una tristeza que no es capaz de superar".
En estos momentos, María Teresa Campos se siente "sola y olvidada". Desde su entorno señalan que la periodista pasa sus días "jugando a las cartas, ve la tele y sale a pasear en coche con su fiel chófer Gustavo, su persona de confianza". Por otra parte, la presentadora también está preocupada por la inestabilidad laboral de sus hijas y su nieta.
Respecto a su vínculo actual con sus hijas, "Carmen Borrego y Terelu Campos aparecen poco por su casa". La persona del entorno de María Teresa Campos agrega: "Terelu, algo más, porque vive al lado y Teresa va allí a pasar con ella un día del fin de semana". Quien sí la visita mucho más seguido es su nieta Alejandra Rubio con quien comparte las tardes jugando a las cartas.
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