La segunda docuserie de Rocío Carrasco trajo consigo un sin fin de sorpresas. La hija de Rocío Jurado no solo se dedicó a desvelar algunas situaciones impensadas de su familia, sino que también tuvo algunas actitudes que pocas personas podrían imaginar. Una de ellas, ha sido la inesperada defensa hacia José Ortega Cano que ejerció en el último episodio.
Rocío Carrasco dedicó mucho tiempo a hablar sobre "el problema" que sufrió José Ortega Cano. Según ella, tras la partida de Rocío Jurado, esta situación empeoró, hasta volverse completamente incontrolable para el diestro. En ese contexto, afirmó que su familia más cercana hizo todo lo posible para contenerlo y ayudarlo a controlar lo que le sucedía. "Lo que estaban haciendo era velar por la integridad y por la imagen y la salud de su hermano", explicó.
Si bien Rocío Carrasco se mostró comprensible y empática con José Ortega Cano, no siguió la misma premisa con sus tíos, especialmente con Gloria y Amador Mohedano. En sus declaraciones acusó a esos integrantes de la familia de aprovecharse de la situación del torero, aunque sin especificar la manera en la que lo hacían. "La otra parte lo que quería era, de una forma o de otra, sacar provecho y rendimiento económico", sentenció.
De esta forma, Rocío Carrasco defiende a José Ortega Cano e intenta justificar algunas situaciones que se vivieron tras la partida de su madre. Aún así, queda claro que esta actitud nada tiene que ver con un posible acercamiento hacia él, sino más bien con su cruzada por desenmascarar a lo que ella define como su "familia mediática".