Luego de darse a conocer la separación de Shakira con Gerard Piqué, la cantante inició un nuevo rumbo en su vida. Alejada de la prensa y del entorno público, se refugió en sus hijos, sus padres y hermanos. Desde Barcelona pero con miras de mudarse a Estados Unidos, la estrella latinoamericana deberá enfrentar un varapalo legal antes de seguir con sus proyectos.
Este martes, Shakira comenzó su día con la peor noticia, la jueza del Juzgado de Instrucción 2 de Esplugues de Llobregat (Barcelona) dictaminó la apertura del juicio por presunta defraudación con Hacienda por un total de 14,5 millones de euros. Además, la cantante deberá reunirse con Piqué y sus respectivos abogados para entablar una custodia responsable y así evitar otro varapalo legal en los Tribunales.
Shakira se ve entre la espada y la pared. Si bien, aseguró que Sasha y Milan se convirtieron en sus aliados más firmes, el complejo momento que atraviesa la de Barranquilla hace que se retrase aún más la posibilidad de soñar con una nueva vida en Miami. Según detalló la Justicia, durante los años 2012, 2013 y 2014, la artista latina dejó de tributar en nuestro país, a pesar de tener residencia fiscal aquí.
Tras la imputación a la cantante, los abogados de Shakira remarcaron su actitud intachable para con el fisco y aseguraron que ella: “continuará defendiendo su inocencia, tal y como ha venido haciendo hasta ahora, a través de la presentación de argumentos jurídicos de peso”. Lo cierto es que, hasta que la defensa de la artista no presente todos los alegatos, la jueza no determinará una fecha para el respectivo juicio. De momento, la de Barranquilla simplemente puede ganar tiempo para mantener el equilibrio entre lo profesional y lo familiar.