Rosa Benito está de festejo. Más sonriente que nunca y rodeada de todos sus seres queridos, la excuñada de Rocío Jurado volvió a dar una vuelta más al sol llena de vitalidad. Sin embargo, una extraña, pero recurrente actitud hizo que su paz mental esté resguardada de todos aquellos que quieran arremeter en su contra y destrozar su última publicación de su cuenta personal de Instagram.
"Hoy ha sido un día precioso, 68 años he cumplido y estoy feliz porque la vida se llena de momentos, momentos de felicidad junto a los tuyos, siempre falta alguien, pero están en mi corazón", comenzó diciendo Rosa Benito frente a un carrusel de imágenes y videos elocuentes del pasado fin de semana. Asimismo, la estilista se corrió de las normas y exclamó: "Mi casa no es de protocolo, pero sí es de [cariño]. Gracias a todas las personas que me han felicitado, un millón de gracias".
No obstante, Rosa Benito desactivó la caja de comentarios para que nadie intente amargar su día. Esta acción también fue llevada a cabo el día en que le dedicó unas palabras, también por este medio, a su exmarido Amador Mohedano. Es que la madre de Chayo tiene experiencia en ser blanco de críticas por parte de los haters que están al acecho de desprestigiar su imagen. Por tal razón, decidió cortar todo por lo sano utilizando las herramientas de privacidad que brindan las redes sociales.
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La fotografía que mejor caracteriza a Rosa Benito
Como era de esperarse, su hija Rosario Mohedano homenajeó a su antecesora con un sentido posteo donde se excusó de haberse tardado por demorar en el saludo público. "Elegí esta foto para que tengas todos los días de tu vida este mensaje mío presente: Presume que puedes, ratita mía". Finalmente, Rosa Benito agradeció las palabras de su adorada heredera: "Gracias mi vida, no has podido elegir mejor fotografía, así es mi vida, un cuento… un cuento de muchos sueños… sueños maravillosos, sueños que a veces, cuando salía el 'Coco', ese que de niña nos asustaba, le plantaba cara y dejaba de darme miedo para hacerme más fuerte en la vida, tenemos que plantarnos y decir: 'Eh, que mis sueños e ilusiones, a pesar de los años, los tengo intactos y nada ni nadie me los va a quitar'".