Los reyes Felipe y Letizia continuaron con su agenda oficial en Copenhague, en medio del revuelo generado por las imágenes de Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova paseando por Madrid. El miércoles 8 de noviembre marcó el final de su viaje de Estado, culminando con una visita al Centro de Arquitectura local en compañía de los príncipes herederos y un emotivo adiós a la reina Margarita en el Palacio de Fredensborg.
Aunque Letizia pasó desapercibida la noche del martes, recuperó su protagonismo el miércoles junto a Mary Donaldson gracias a un elegante cambio de vestuario. Abandonando las lentejuelas, la reina optó por un vestido blanco satinado de Raph Lauren, una pieza que ya había lucido un año atrás en Nueva York, compuesto por una falda plisada y blusa a juego, complementado con una cartera y unos imponentes tacones.
Mary Donaldson se convirtió en la anfitriona perfecta para la reina Letizia en Copenhague, compartiendo una cercanía que sorprendió a muchos. Sin embargo, nuestra royal no anticipó que se convertiría en un apoyo inesperado para Mary, tras la publicación exclusiva de fotos de su esposo y Genoveva Casanova paseando por Madrid.
La complicidad entre Letizia y Mary de Dinamarca
En su último día en Dinamarca, Mary eligió un atuendo "working girl" verde, adornado con un broche de diamantes en forma de flor, combinado con una blusa plisada en blanco. La jornada concluyó con despedidas personales a la reina Margarita y un encuentro de Felipe y Letizia con la comunidad de España en la embajada, marcando el cierre de un viaje lleno de acontecimientos inesperados.