Las monedas españolas, especialmente las antiguas, pueden ser más que simples piezas de colección. Por ejemplo, el Centén, una moneda de oro acuñada en 1609 por Felipe III, es una de las más raras y valoradas en el mundo numismático. Un Centén en buen estado podría alcanzar precios por encima de los 200.000 euros en subastas.
Otra moneda que podría transformar tus finanzas es la moneda de plata de 5 pesetas acuñada durante el reinado de Alfonso XIII. Las monedas en excelente estado, sobre todo las de años específicos como 1891, pueden llegar a valer decenas de millas de euros.
Las monedas de la serie de los "Reales de a Ocho" son famosas por su uso en todo el mundo durante los siglos XVI al XIX. Estas se acuñaban en territorios españoles de América Latina y han sido la base de muchas monedas modernas, incluido el dólar estadounidense. Una de estas piezas, especialmente si se encuentra en condiciones prístinas o tiene una historia única, puede alcanzar precios de hasta 50.000 euros o más.
Para los más modernos, las primeras emisiones de la moneda de euro en España, en el año 2002, también tienen su encanto coleccionable. Aunque no tan valiosas como las anteriores, algunas de estas monedas con defectos de acuñación han llegado a venderse por más de 1.000 euros en el mercado secundario. Conocer bien la historia y detalles de cada pieza podría convertirse en una verdadera oportunidad para cambiar tu futuro financiero.