Los perros y gatos son integrantes esenciales de las familias de todo el mundo, casi un hijo o un hermano más para cualquiera. Sin embargo, en ese mismo hogar lleno de cariño, también pueden existir algunos elementos que pueden perjudicarlos, como las plantas que poseemos. Por eso, en este artículo, nos centraremos en las tres que hay que eliminar cuanto antes.
La primera de ellas es el laurel. Se trata de una planta que puede ser tóxico para los perros y los gatos debido a la presencia de eugenol y otros aceites esenciales. Por eso, es importante evitar que las mascotas entren en contacto con esta y que no la consuman de ninguna forma.
Seguido al laurel también es importante mencionar a los lirios como una planta con la que tener sumo cuidado. Todas las partes de ella son muy tóxicas para los perros y gatos y pueden traer todo tipo de complicaciones y perjuicios para ellos. Por eso, es importante prestarles mucha atención y mantener a nuestras mascotas alejadas de ellos.
Por último, es imposible pasar por alto lo que la ingesta de muérdago puede hacer en los perros y gatos. Esta planta posee lectinas que pueden afectar el corazón de nuestras mascotas, al punto de llegar a causarles presión arterial baja o una frecuencia cardiaca más lenta.