Pablo Urdangarin asistió este sábado junto a sus padres, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin a su debut con el primer equipo del Barcelona de Baloncesto. Desde pequeño el nieto de la reina Sofía ha demostrado su pasión por este deporte y ha desarrollado su talento desde entonces.
Desde las gradas del Palau Blaugrana sus padres se han sentado, discretos y entre el público, mientras Pablo hizo su debut con tres puntos. Su equipo venció 39-30 frente al Bada Huesca en la octava jornada de la Liga Asobal. El hijo de la infanta Cristina mide 1,86 y es zurdo, como su padre Iñaki.
Pablo empezó a jugar en el Liceo Francés, posteriormente en el Esplugues y después en el juvenil de Hannover mientras la infanta Cristina se mudó a Suiza. Después de que en 2019 fuera fichado por el Nantes llegó al Barça, cuando fue convocado por el técnico Carlos Ortega, quien lo conoció cuando jugaba con el equipo de Hannover, mientras su padre estaba en prisión.
Sin embargo, esta vez, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin han podido presenciar el éxito en su debut con el equipo del Barça. Desde luego el triunfo de Pablo representa un orgullo para su padre, quien jugó con el Barcelona toda su vida como deportista y ganó dos medallas olímpicas con la Selección Española.