El rey emérito sin duda ha sido una de las personas que mayor marca a dejado dentro de la historia de España, no solo por su complicada gestión sino por su vida sentimental. Juan Carlos I contrajo matrimonio en 1962 con Sofía de Grecia. En ese entonces, dicha unión fue considerada como un asunto de estado por los representantes de dichos países, sin embargo; a los ojos del mundo entero y durante sus primeros años de convivencia, la pareja se convirtió en el modelo de muchos otros matrimonios reales.
No obstante; con el pasar del tiempo, Juan Carlos I no pudo seguir escondiendo sus encantos y su verdadera personalidad. Y es que durante las varias décadas de matrimonio que compartió con la reina Sofía, el emérito no logró dejar de lado las aventuras extramaritales, convirtiéndose en el protagonista de las más escandalosas portadas de las revistas y los medios de comunicación más importantes a nivel mundial, manchando así su reputación como marido y padre de familia.
A pesar de que Juan Carlos I estuvo involucrado con una larga lista de amantes, una en particular marcó por completo su vida, Corinna. Hace varios años la empresaria alemana confesó que mantuvo un intenso romance con el emérito, no obstante; este no fue pasajero pues, en su momento, esta confesó que habían estado juntos por poco más de ocho años. El monarca y Larsen se conocieron en el 2004 y fue en el 2012 luego de destaparse su romance que el padre de el rey Felipe tuvo que tomar la decisión de abdicar a la corona.
Durante su participación en el podcast realizado por Project Brazen, Corinna Larsen develó cómo había sido su historia con Juan Carlos I. "Hay algo bastante desquiciado en él y algo bastante despiadado, cada vez tenía más claro que él llevaba no sólo una doble vida, sino una quíntuple" expresó la alemana, quien a sus 58 años confesó que más que una novia, se sintió como esposa del emérito.