El rey Felipe VI continúa con su ajetreada agenda. Durante la semana pasada viajó casi todos los días para cumplir con sus actos oficiales que lo llevaron desde Vigo a Valencia y de Nueva York a París. Esta semana el rey ha querido estar presente en la final del Roland Garros.
Al llegar a los palcos de honor, el monarca coincidía con Haakon y Mette-Marit de Noruega, junto a quienes ha podido ver del espectáculo deportivo con suma complicidad. Este domingo, Rafa Nadal se enfrentaba al noruego Casper Ruud en la búsqueda de su decimocuarta copa, motivo por el cual los reyes no se han querido perder este enfrentamiento.
Finalmente, el murciano se hacía con la victoria, sumando así 22 títulos de Grand Slam (dos más que Novak Djokovic y Roger Federer). Al igual que su padre, Felipe VI mantiene una relación muy estrecha con Rafa Nadal, motivo por el cual el Rey no ha dudado en acudir a los vestuarios para saludar al deportista y darle la enhorabuena por su victoria.
Tras la victoria en tres sets del balear, el rey aseguró que, sin duda, “Nadal es el rey de Roland Garros y del tenis mundial. Imaginad como estamos todos. Ha conseguido un récord muy difícil de batir", concluyó el monarca. Mientras tanto, la Reina Letizia se encontraba en Nuakchot, Mauritania, llevando a cabo un viaje de cooperación.