España se vistió de luto tras la triste noticia del fallecimiento de Mila Ximénez. La escritora y emblemática periodista murió a sus 69 años luego de una larga batalla contra el cáncer de pulmón. Su pelea contra la enfermedad hizo que gradualmente abandonara el plató de Sálvame, ya que no tenía fuerzas para continuar trabajando. Tan pronto como salió a la luz su deceso, se llevó a cabo un evento para darle el último adiós.
Muchos rostros conocidos de amigos y allegados a la figura del canal se acercaron al tanatorio. Los primeros en llegar han sido Alba y sus tíos. Junto a ellos se encontraba la hija de la colaboradora de televisión, que vestía de negro y con gafas de sol, estaban Encarna y Concha, que caminaban de la mano apoyándose la una en la otra . «Os agradadezco el cariño y el respeto. Son momentos difíciles», ha comentado Manolo Ximénez a su llegada a la capilla ardiente.
Por su parte, Manolo Ximénez, hermano de la periodista, ha informado que mañana será incinerada en el Cementerio de la Almudena y sus cenizas se las llevará su hija a Ámsterdam. Ella había viajado la semana pasada para reencontrarse con su madre, quien se encontraba sedada en una cama donde finalmente dejó de respirar.
La última aparición de Mila Ximénez
"No quiero seguir viviendo así" decía la colaboradora durante una de sus últimas apariciones públicas. Venía sometiéndose a sedación paleativa para el dolor. El jueves 10 de junio se conoció públicamente que la profesional había sido ingresada al Hospital La Luz de Madrid y dada de alta 48 horas más tarde: "Cada vez me cuesta más sacar fuerzas y salir adelante. Vivo con miedo y no me gusta", declaraba.