Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler, ha evitado pronunciarse en los asuntos delicados que rodean a su madre, como la polémica con Laura Boyer y la ruptura con Mario Vargas Llosa. Tamara, que presume de tener un excelente vínculo con su madre, se ha mantenido discreta en estos complicados momentos, mientras que personas externas a la familia han tenido que explicar los hechos públicamente. A pesar de las acusaciones que Isabel ha recibido, Tamara no ha manifestado apoyo a su madre en ninguna de estas situaciones.
Isabel Preysler ha sido objeto de controversia en los últimos meses debido a su ruptura con Mario Vargas Llosa y a su supuesto incumplimiento de la última voluntad de Laura Boyer. Ni Isabel ni su otra hija, Ana, asistieron al último adiós a Laura, confirmando una fractura total en el clan de los Boyer. Aunque Tamara Falcó ha presumido un excelente vínculo con su madre, no ha dado la cara por ella en ninguno de estos momentos difíciles.
En el caso de la polémica con Laura Boyer, la abogada de la familia ha explicado que Isabel Preysler solo ha cumplido la última voluntad del exministro, y que dispone de la propiedad del mausoleo familiar en el que se encuentran sus restos. Por su parte, la propia Laura Boyer concedió una entrevista poco antes de fallecer en la que definía a Isabel como una dama "fría y calculadora" y confirmaba el insalvable conflicto con la viuda de su padre. Tamara Falcó, sin embargo, no ha tenido ni un gesto de apoyo a su madre ante esta contienda mediática.
Tamara Falcó, lejos de la polémica
Tamara Falcó siempre ha optado por alejarse del foco y evitar pronunciarse sobre las polémicas de su familia. Aunque en el caso de su vínculo con Íñigo Onieva no ha dudado en ofrecer declaraciones públicas, probado su pesar y alegría ante la infidelidad de su pareja y la posterior reconciliación. Ahora, mientras ultima los preparativos de su boda, Tamara parece no estar dispuesta a cambiar su foram de actuar y deja sola a su madre en medio de la crisis.