La separación entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva ha caído como un auténtico baldazo de agua fría en el entorno de la pareja. Tras la filtración del polémico vídeo en el que se puede ver al empresario muy cariñoso con otra dama, los planes de boda con la hija de Isabel Preysler se han derrumbado, al igual que sus ilusiones.
De hecho ha sido Carolina Molas, la madre de Íñigo Onieva, quien ha develado cómo se encuentra su hijo en estos complicados momentos de elevada exposición mediática generada por las evidencias de una presunta infidelidad hacia su prometida. "Los dos están muy mal. Cada uno con sentimientos distintos obviamente", aseguró.
"Estamos muy tristes. Estamos todos muy mal", ha confesado Carolina. La progenitora de Onieva ha mantenido siempre un excelente vínculo con Tamara Falcó y no ha dudado en asegurar que la marquesa de Griñón también se encuentra en un momento crítico. Así lo han ratificado desde el plató de 'Ya es verano': "No ha parado de llorar y aunque Íñigo intenta conectar con ella por todos los medios, ella no quiere hablar con él".
Tamara le habría pedido a Íñigo Onieva que retirara todas sus pertenencias del hogar donde han convivido; mientras tanto, ella se encuentra en casa de su madre recibiendo el apoyo de su familia. Isabel Preysler también tiene un inmenso disgusto con el prometido de su hija, de quien nunca se ha confiado completamente.